aeroenrique escribió:Yo estaba igual que vos y me comprè la Tornado.
El Domingo regresando a casa (200 km), la traje a 115/120 y me hiso 24.5 km/l...de ida, fui aguantando a un amigo de menos cilindrada, a 90/100, me mandò 26.5 km/l....
La XTZ250 tiene inyeccion, la cual es bastante dlicada, he sabido de varias con problemas, sobre todo cuando en la ruta, cargas en una estacion que "perrea" la nafta, o cuando pasa un tiempo que no la andas, y la nafta del tanque, pierde octanaje...problema asegurado....si es por la altura, le tocas el regulador de mezcla a la Tornado y chau.
Al final de todas las idas, compré la Tornado que en el inicio no estaba en mi lista. A pesar de su escasísimo tablero y la no inyección me decidí por el modelo nuevo, que de nuevo sólo los calcos que por cierto mucho más lindo.
Mis temores de la inyección en altura fueron demolidos brutalmente, el carburador de la torneta impresionante. Les comento que luego del servicio de los 1000 km hice el viaje que tenía planificado con la anterior moto que me robaron. Ni bien salida del mecánico, inicié el viaje hacia el noroeste argentino, en un día llegué a Chamical (La Rioja) descansó unas horas para rumbear al otro día a Belén para hacer el servicio de los 3000 km.
Por lo general no planifico demasiado los viajes en cuanto a dónde ir, por eso de a poco comencé a alabar el carburador de la Tornado. Llegué a Seclantás (Salta) y pensaba continuar hasta La Poma, unos 80 km creo, sin embargo en la intersección con la 33 el cartel indicaba, Abra del Acay algo de 90 km más, eran las 11 de la mañana y tanque recién cargado en Cachi, asi que pensé, en otro momento no creo estar tan cerca y es temprano, asique La Poma quedó relegada y seguí rumbo al emblemático sitio que alguna vez quise hacer en bicicleta. Grata fue mi sorpresa para el comportamiento de la moto en semejantes alturas, cruzó perfecto los tres arroyos y yo con mucho cagazo de caerme y preferí mojarme las botas y pies y cruzarlo andando con los pies en el aire/agua. Lo impresionante fue que tuve una caída en las curvas cerradísimas y rectas cortísimas, pero la moto volvió a arrancar, le costó un poco pero no sé qué hubiera pasado si ocurría con una a inyección si respondería tan rápido, hubo que mantenerla acelerada un tiempo pero respondió.
Alrededor de las 16 hs llegué al hito del abra, 4895 m, agradecí en una apacheta y felicité a la Tornado, fueron 5 horas de motor prendido en subidas durísimas a no más de 40, en algunos tramos a 60/80.
La moto se comportó genial todo el viaje, los frenos son impresionantes, lo único renegable es el consumo que tiene poco rendimiento, pero fácil de solucionar con un bidón extra. Rindió aproximadamente 270 km con tanque lleno, lo máximo que anduve sin cargar fueron 241 km dándole luego casi 7 litros de nafta.
En fin, muy sorprendido con la Tornado, máquina muy noble y de la potencia necesaria para rutear y pasar vehículos, llegó a más de 130 en algunos sobrepasos y no se sentía sobreexigida. El asiento es un tema, pero es claro que es una moto on-off, asique no es punto para restarle, se soluciona con algún acolchado, por mi parte utilicé una calza de ciclismo y alargó un poco más la comodidad.
Detalles nimios: pedales un poco cortos y sobretodo demasiado alejados de forma que al apoyar los dos pies en el suelo los rozaban de forma incómoda; pata de cabra demasiado larga y muy vertical, no me generaba confianza que pueda sostenerla en especial en estos terrenos muy irregulares.
Asique mi duda en las alturas quedó ampliamente superada, más alto que el Acay no voy a estar, y la Tornado lo superó con creces.
Hermosa moto.