Campeonatos del Mundo
Garriga, del cielo al infierno en moto
Joan Garriga, sub-campeón del mundo de 250cc en 1988, está considerado por muchos aficionados al motociclismo como el piloto español mas carismático de todos los tiempos.
Era conocido como el “Comecocos” por llevar siempre uno en el casco, o por “Boing 747” debido su envergadura (era un piloto muy alto y delgado, una complexión parecida a Kevin Schwantz o Valentino Rossi). De su pilotaje destacaban sus apuradas de frenada, como todos los pilotos españoles de la época, curtidos en carreras regionales en polígonos o ciudades donde debían hacer grandes frenadas al llegar a las esquinas, pero Garriga era el mejor en eso...
Ese cariño de los aficionados se lo ganó al luchar con un pilotaje muy agresivo por el campeonato del mundo del año 1988 sobre una lenta Yamaha contra la potente Honda de Sito Pons, al que tuvo en jaque hasta la última carrera del año, incluso pudo haber llegado a la última carrera como líder si Sito no le hubiese pegado una cerrada “a lo Simoncelli” en la última vuelta de la antepenúltima carrera en el circuito de Anderstorp (Suecia) cuando Garriga estaba adelantando a Pons. Esa oscura maniobra de Pons fue una de las muchas que le brindó la vida a partir de entonces, quizás si Pons no le hubiese echado fuera y Garriga hubiese sido campeón, la historia de este piloto hubiese sido diferente.
Su Vida
Joan era de Vallvidriera, por lo que debía hacer cada día la Arrabassada para ir a casa. Ahí su alma se empapó de espíritu motero viendo a los quemados subir y bajar con sus Bultacos y Montesas. Dicen que su talento fue descubierto y animado a competir en moto por un hombre que comprobó alucinado como un niño de pelo rubio ensortijado le adelantaba por el exterior cuando un día volvía a su casa de Vallvidriera. Dejó su trabajo como administrativo en una sucursal de la Caixa de Catalunya y a partir de ahí todo fue rápido.
En 1980, con solo 17 años (un bebé para la época, no es como ahora que si con 17 años un piloto no ha destacado ya está acabado) comenzó a hacer carreras, muchas de ellas subidas en cuesta sobre una Yamaha TZ 250. En 1981 fue octavo en el Trofeo Señor 250, y al año siguiente ya disputó el título a Paco Álvarez Eulate, incluso pudo ser campeón si hubiese reclamado una irregularidad de Paco por la que podía ser descalificado, pero no lo hizo, un noble gesto. En 1983 alternó varias categorías (F-1 Prototipos, F-1 Siluetas, Nacional de 250 y el Mundial de 250 reemplazando a un lesionado Sito Pons).
El año 1984 fue el año de sus primeros éxitos: ganó el Nacional de 250 y las 24h de Montjuic, y compitió en el mundial de 250. En 1985 hizo por fin el mundial completo sobre una JJ-Cobas, volvió a ganar las 24h de Montjuïc y ganó sobre una Suzuki GSX-R 750 en las Series.
Su polivalencia y juventud le aupó a su primera moto oficial: una Cagiva 500. Era una trampa, la Cagiva entonces era una moto nueva, casi artesanal, que nunca había destacado ni con pilotos mas expertos y con mejor currículum que Garriga. Pero Garriga se peleó con esa moto y en su primera carrera en el Jarama consiguió ser 8º, el mejor resultado de una Cagiva. El resto de la temporada fue gris, aquella moto no funcionaba, y su único título fue el Nacional de 500, un campeonato casi de “clásicas” que se llevó de calle con su moto mundialista.
En 1987 volvió a su categoría preferida, los 250cc. Consiguió el patrocinio de Ducados y pudo disponer de una Yamaha oficial. Consiguió su primer podium en Jerez, 3º, y un segundo puesto en el Jarama siendo a final de temporada 11º en el Mundial, un puesto que le hizo llevar ese mítico dorsal 11 la temporada siguiente.
Pero 1988 fue su año. Consiguió que España entera vibrase con el motociclismo como nunca antes y nunca después. En los bares no se hablaba de otra cosa: Sito o Garriga, Garriga o Sito. Eran dos bandos irreconciliables, una especie de Barça y Madrid en el futbol, que se deseaban lo peor, como los protagonistas de la historia. Eran la noche y el día: Sito era pequeño, endeble, seguro, frío, calculador, con un entorno poderoso (¿incluso oscuro?), Garriga era alto, fuerte, valiente, espectacular, el débil económicamente, el temperamental, incluso grosero en las declaraciones, rebelde, y con un entorno menos influyente. Además Sito corría con Honda (una moto muy estable y potente) y Garriga con una Yamaha (una moto con una excelente parte ciclo que le permitía conducir de una forma agresiva... pero que en las rectas era fulminado por las Honda), todo ello en un momento de una lucha sin cuartel entre ambas fábricas. El escenario estaba creado, comenzaba la guerra dentro de los circuitos entre Pons y Garriga, y en la afición entre los sitistas y garriguistas.
Garriga ganó 3 carreras ese año, incluso en una de ellas (Assen) en un gesto de rabia hizo una botifarra al entrar en meta primero tras ver la caida de Pons y Sarron en la chicane final. Llegaron a Anderstorp, antepenúltima carrera de año, prácticamente empatados a puntos. Fue una carrera en grupo alucinante. Anderstop tenía una recta de un kilómetro de largo y cada vuelta era idéntica: Garriga empezaba la recta primero, lo adelantaban todas las Hondas, y en la apurada de frenada los pasaba a todos. En la última vuelta, entre dos curvas de izquierda casi seguidas, Garriga, al salir con mucha mas velocidad de la primera se metía por el interior de la siguiente para adelantar a Sito. Entonces Sito hizo una ese sospechosa cerrando el camino a Garriga. Quedaban sólo dos carreras, porque la FIM anuló el GP de Argentina, en el revirado circuito de Buenos Aires que cláramente beneficiaba a Joan, Garriga ganó en Brno llegando a 6 puntos de Sito a la última cita de Brasil. Si Garriga hubiese ganado la carrera de Anderstorp hubiese llegado a la última carrera como líder, en cambio Sito llegó con una situación envidiable: si Garriga ganaba en Goiania sólo con ser 3º le bastaba. La última carrera fue el inicio de la mala suerte de Garriga: en la primera curva un golpe le hizo hacer un recto, retomando la carrera en última posición y remontando hasta un inútil puesto 5º. Sito campeón.
Al año siguiente se debía repetir el duelo, pero la Yamaha fue una moto del montón, a muchísmos caballos de la Honda y con muchísmas roturas. Garriga fue 8º en el mundial y Sito revalidó el mundial con mucha comodidad.
Para 1990 ambos dieron el salto a 500cc con sus marcas de los últimos años. Ahí Sito sufrió muchas caídas y lesiones incapaz de domar una moto de 500cc con su pequeño cuerpo, y Garriga, sin destacar pero siendo muy regular consiguió ser el mejor europeo en una época donde los americanos y australianos eran los únicos capaces de domar a esos caballos desbocados que eran las motos de 500cc de principio de los 90. 1991 fue una copia del año anterior, y en 1992, siendo la tercera temporada de Garriga en la máxima categoría tocaban nuevas metas, pero esa temporada Honda se sacó de la chistera el motor Big-Bang, mucho mas dócil que los demás, por lo que en la primera mitad de la temporada Honda acaparó casi todas las victorias y podiums (hasta un novato como Alex Crivillé ganó una carrera, fue tal el espejismo que tardó 3 años en repetir la gesta). Para el final de temporada Yamaha le subministró a Garriga por fin un motor Big-Bang con el que en igualdad de condiciones con el resto consiguió su primer y único podium en la categoría en Donington Park.
Para 1993 Garriga rechazó una oferta de Suzuki para correr en 500cc siendo compañero de Kevin Schwantz. Prefirió quedarse en su marca de siempre, Yamaha... pero el entorno de Sito otra vez se cruzó en su vida: Ducados le retiró el patrocinio para apoyar a Alberto Puig en 250cc dentro del Team Pons... otra vez Pons le hacía otra “cerrada”, como aquella de Anderstorp’88. La falta de dinero le hizo abandonar la aventura de 500cc y fichó por el equipo Ducati de Superbikes. Cuando por fin se hizo a la moto y consiguió un podium en Hockenheim (2º) decidió retirarse a mitad de temporada. Ahí acabó la historia de Garriga en el mundo de las motos con solo 30 años.
Subcampeón del Mundo de 250 (1988).
3 victorias en GP (250).
4 Campeonatos de España (250-500-Resistencia).
2 victorias en las 24 Horas de Montjuïc (1984-1985).
2 títulos en Motociclismo Series (1985).
1 Subcampeonato Trofeo Senior 250 (1982).